
Patriarcas y jefes de Iglesias y Comunidades Eclesiales que viven en Siria han solicitado a la ONU y los países occidentales que se levanten las sanciones y el embargo económico contra la República Árabe Siria tras el terremoto que sacudió este lunes 6 de febrero amplias zonas del país.
En un comunicado firmado por el Patriarca de Antioquía de los sirio-ortodoxos, Mar Ignatius Aphrem II, el Patriarca de Antioquía de los greco-ortodoxos, Yohanna X y el Patriarca de Antioquía de los greco-católicos melquitas, Youssef I Absi, entre otros, han pedido que retiren inmediatamente estas medidas definidas como «inicuas» y que, en su lugar, pongan en marcha «iniciativas humanitarias excepcionales y oportunas para ayudar a las poblaciones sirias abrumadas por catástrofes insostenibles».
El terremoto se ha cobrado miles de víctimas en Siria, sembrando la destrucción y multiplicando el sufrimiento del pueblo sirio, ya doblegado bajo el peso de la guerra, la pandemia, la inflación y la falta de recursos naturales, medicinas y artículos de primera necesidad.
Este jueves, el primer convoy de Naciones Unidas con ayuda humanitaria ha cruzado la frontera entre Turquía y Siria para entregar ayuda en el noroeste del país árabe a los damnificados por los terremotos registrados el lunes, que han dejado más de 17.000 muertos, incluidos más de 3.000 en territorio sirio. Esta zona de Siria vive desde hace casi 12 años una guerra civil.
«Hacemos también un llamamiento a las personas de conciencia viva de todo el mundo, para que alcen su voz pidiendo el fin del sufrimiento del pueblo sirio y permitan a los ciudadanos sirios vivir con dignidad, de acuerdo con lo establecido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos», han incidido en el comunicado.
Vía: Europa Press