Al recordar el Día del Trabajador, el presidente Luis Arce acusó a la “nueva derecha”en alusión a los ‘evistas’ de pretender desestabilizar a su Gobierno por ambiciones de una sola persona para satisfacer su “sed de poder”. También el jefe de Estado dijo que enfrenta una “guerra híbrida” ante los ataques del ala radical ‘evista’ y de la oposición.
Durante su discurso, el mandatario aseguró que desde que llegó a la presidencia, la oposición intentó “conspirar” contra su administración.
Arce participó desde temprano de los actos por el Día del Trabajador. Fue parte de una marcha que partió desde la plaza San Sebastián, en la ciudad de Cochabamba, y que recorrió las principales vías de la capital valluna, hasta llegar a la plaza 14 de Septiembre, donde el mandatario dio su mensaje de homenaje a los trabajadores.
Mineros, fabriles y cientos de trabajadores de varios departamentos se hicieron presentes en la actividad. Durante esta manifestación, una facción evista lanzó gritos de “Lucho traidor” al jefe de Estado.
“A ese accionar de la derecha tradicional, se ha sumado la nueva derecha que quiere desestabilizarnos, generar movilizaciones para cumplir ambiciones de una sola persona, no de todo el pueblo, quiere boicotear la economía del pueblo, quiere pisotear a las verdaderas organizaciones y sus dirigentes para satisfacer su sed de poder”, dijo.
En la actualidad, señaló que se vive una “guerra híbrida” donde personas que fueron aliadas se volvieron funcionales a la estrategia de la “derecha” para sabotear la economía y al “bloqueo” económico desde la Asamblea Legislativa Plurinacional.
“Esto no puede pasar, no lo debemos permitir, Bolivia tiene definido su futuro y es construir una patria industrializada con soberanía económica para consolidar la soberanía política, esa es la senda donde estamos caminando junto a ustedes, junto a los trabajadores, junto al pueblo boliviano”, sostuvo.
DECRETO
Durante este miércoles, el presidente Arce entregó a la Central Obrera Boliviana (COB) el Decreto Supremo 5155, que oficializa el incremento salarial del 5,85% al mínimo nacional y 3% al haber básico. La entrega del documento antecedió a una marcha partió desde la plaza San Sebastián. Pese al contexto adverso internacional, Arce recordó que Bolivia se posiciona como el segundo país con la más baja inflación en toda la región.
“GUERRA HÍBRIDA”
El presidente Luis Arce denunció que los bolivianos viven al interior de una “guerra híbrida” que cumple con cada una de sus fases, al igual que antes del golpe de 2019. Algunos se vuelven funcionales a la estrategia de la derecha, al sabotear la economía y al bloquear económicamente desde la Asamblea Legislativa.
//Correo del Sur