Desde tempranas horas de este miércoles, la ciudad de La Paz conmemoró los 216 años de la Revolución del 16 de Julio de 1809, con una serie de actos oficiales y religiosos que reunieron a autoridades, instituciones y ciudadanía.
Las actividades comenzaron en la Plaza Murillo con la tradicional ofrenda floral al pie del monumento a Pedro Domingo Murillo, símbolo del movimiento libertario que marcó el inicio de la lucha por la independencia en América Latina. El acto estuvo acompañado de honores militares y la entonación del Himno Nacional, seguido del Himno a La Paz.
Posteriormente, se encendió la Tea de la Libertad en la Casa de Murillo, como gesto simbólico de compromiso con los ideales de libertad y justicia. Esta tradición marca el inicio del desfile de teas por las principales arterias del centro paceño, donde participaron autoridades, representantes de instituciones y vecinos de la ciudad.
Uno de los momentos más significativos de la jornada fue la celebración del solemne Te Deum en la Catedral Metropolitana de Nuestra Señora de La Paz, ubicada en Plaza Murillo. La misa fue presidida por el arzobispo de La Paz y congregó a representantes de las Fuerzas Armadas, instituciones públicas y privadas, así como a fieles devotos.
Durante la homilía, se reflexionó sobre la necesidad de unidad, diálogo y renovación espiritual para avanzar hacia un país más justo y solidario. Asimismo, se rindió homenaje a la Virgen del Carmen, patrona de Bolivia, en cuya festividad se inscriben también estos actos conmemorativos.
La ceremonia concluyó con una procesión de la imagen de la Virgen del Carmen, que recorrió las calles aledañas a la Plaza Murillo, acompañada por música sacra, flores y la presencia de fieles.
Los actos conmemorativos continuarán durante el día con desfiles, presentaciones artísticas y espacios de confraternización en diferentes puntos de la ciudad.