Samuel Doria Medina, con su frondosa barba y una prenda roja, con el narco Isaac Chavarría, en una fotografía publicada por El Diario. | Foto: RRSS
La renuncia de María Karla Robledo Guardia a su candidatura al Senado por Santa Cruz, dentro de la alianza encabezada por Samuel Doria Medina, volvió a colocar en el ojo público antiguos vínculos entre la política y el narcotráfico. Robledo, hija del narcotraficante condenado Carlos Arturo Robledo Añez, alias “El Gafas”, fue señalada por su cercanía con el candidato presidencial.
Desde la alianza Libre, liderada por Jorge Tuto Quiroga, el vocero Tomás Monasterio pidió explicaciones urgentes. “Doria Medina, da la cara. ¿Está tu campaña financiada por el clan Robledo?”, cuestionó desde su cuenta en X, y no dudó en comparar este caso con el escándalo del “Oso” Chavarría, narcotraficante de los 80 con quien el empresario fue fotografiado en 1994.
Monasterio recordó que no es la primera vez que se vincula a Doria Medina con figuras del narcotráfico: “Distintos capos, mismo patrón”, escribió.
Aunque el diputado de Creemos, Erwin Bazán, salió en defensa de Robledo —a quien describió como una abogada capaz—, evitó aclarar si su alianza conocía los antecedentes de su padre. Robledo, que hoy trabaja en el equipo jurídico del gobernador Camacho, quedó en medio de una polémica que amenaza con salpicar a todo el bloque opositor.
La presión crece. Libre exige que Doria Medina retire su candidatura si no puede responder por la inclusión de Robledo en su lista. “Bolivia no puede ser rehén de la narcopolítica”, sentenció Monasterio.