La Roja ya está en La Paz para enfrentar a Bolivia este martes. El partido puede marcar el fin del sueño mundialista para ambos.
La ciudad de El Alto se prepara para recibir este martes 10 de junio (16:00) uno de los partidos más determinantes del tramo final de las Eliminatorias Sudamericanas: Bolivia vs. Chile, en el estadio Municipal de Villa Ingenio. Ambos equipos llegan urgidos de puntos y con la esperanza de meterse en la pelea por el repechaje.
La selección chilena arribó a la sede de gobierno la noche del domingo y se hospeda en un céntrico hotel paceño. Ricardo Gareca, técnico de la Roja, fue el primero en descender del bus, reflejo de la presión que vive el conjunto trasandino, que es último en la tabla con 10 puntos. Una derrota ante Bolivia lo dejaría sin chances de clasificación.
Del lado boliviano, la expectativa es alta. A pesar de la derrota en Venezuela (2-0), la Verde mantiene posibilidades matemáticas y espera hacerse fuerte en casa, en el siempre desafiante escenario de Villa Ingenio, donde la altura puede jugar a favor del equipo dirigido por Antonio Carlos Zago. Bolivia suma 14 unidades y se encuentra a solo cuatro del repechaje, actualmente en manos de Venezuela.
El contexto social también marca este partido. La ciudad de El Alto, epicentro de varias protestas en los últimos días, verá cómo el fútbol concentra la atención nacional. La seguridad está garantizada, según confirmó la Policía Boliviana, con un despliegue especial para el día del partido.
Chile llega golpeado, no solo en lo anímico tras perder 1-0 ante Argentina en casa, sino también en lo físico. Arturo Vidal y Guillermo Maripán están suspendidos por acumulación de amarillas y Alexander Aravena fue desafectado por lesión. Aun así, los chilenos no pierden la fe. Durante su preparación trabajaron con cámaras de hipoxia para contrarrestar los efectos de la altitud.
El entrenador boliviano aún no ha confirmado el onceno titular, pero se espera que apueste por un esquema ofensivo con figuras como Marcelo Martins y Ramiro Vaca, en busca de un triunfo que mantenga vivas las opciones de llegar al Mundial 2026.
El ambiente en El Alto es de expectativa, pero también de compromiso. Desde ya, se prevé una masiva asistencia al estadio de Villa Ingenio, donde el público alteño espera celebrar un triunfo que devuelva la esperanza al fútbol nacional.