
El Gobierno de China ha instado al de Estados Unidos a «dejar de politizar» el origen de la pandemia de COVID-19, después de que el director del FBI, Christopher Wray, y el Departamento de Energía norteamericano apuntasen la posibilidad de un accidente en un laboratorio de la ciudad de Wuhan, considerada la ‘zona cero’ del SARS-CoV-2.
La portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Mao Ning, ha subrayado en rueda de prensa que Pekín «siempre apoya y participa» en unas investigaciones «basadas en la ciencia» y ha recordado que el informe de la misión de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) identificó como «extremadamente improbable» el supuesto origen de laboratorio.
Dicha conclusión, ha dicho Mao, «ha recibido un amplio reconocimiento de la comunidad internacional y científica». Asimismo, ha afirmado que «cada vez hay más pistas» que apuntan a otros potenciales orígenes en otras zonas del mundo, no necesariamente China.
«Estados Unidos no tendrá éxito intentando desacreditar a China sacando de nuevo la teoría de la fuga del laboratorio, sino que sólo perjudicará su propia reputación», ha sentenciado Mao, que ha abogado por «respetar la ciencia y los hechos» al examinar cómo pudo surgir la pandemia a finales de 2019.
Vía: Europa Press