A menos de tres semanas de las elecciones generales del 17 de agosto, el Movimiento de Renovación Nacional (Morena), liderado por Eva Copa, anunció su retiro de la contienda electoral. La decisión, que será formalizada ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) este martes, responde –según Copa– a presiones políticas y dificultades internas.
“Sí, Morena ha decidido no participar de estas elecciones”, confirmó la excandidata en una entrevista con el periodista John Arandia. Copa denunció acoso político y una supuesta instigación desde el interior de su propia organización.
La determinación también se vio influida por observaciones del TSE a sus listas de candidatos y por el bajo rendimiento del partido en las encuestas, lo que ponía en riesgo su personería jurídica.
La noticia generó diversas reacciones. Mientras que Branko Marinkovic (Alianza Libre) afirmó que la salida de Copa “no cambia el tablero electoral”, Samuel Doria Medina (Alianza Unidad) calificó la decisión como “previsible”. Desde el MAS, Eduardo Del Castillo celebró la declinación como una oportunidad para unir fuerzas en la izquierda, y Gabriela Alcón, viceministra de Comunicación, indicó que “son decisiones que cada organización toma”.

