Será un partido de fútbol, sí, once contra once, con sus cambios, sus tácticas, sus faltas y sus intentos de gol, pero, sin duda, lo que ansían ver quienes asistan hoy (19:30 HB) a la cancha para presenciar el Argentina-Panamá es la fiesta de los campeones del mundo.
El Estadio Monumental de Buenos Aires, la cancha del River Plate, será de nuevo la casa de la Albiceleste, esa en la que tan buenos resultados obtuvo siempre en eliminatorias, hasta el punto de que sólo perdió dos en la historia, y volverá a serlo el día en que estrene en su pecho la tercera estrella.
El duelo contra el equipo centroamericano será el primero que los de Lionel Scaloni disputan desde el 18 de diciembre de 2022, fecha grabada en la historia del fútbol local porque fue la de la final del Mundial de Catar 2022 ganada a Francia, que dio el tercer título a Argentina.
Unas 83 mil personas colmarán el estadio de Núñez, pero si la selección hubiera disputado 10 partidos seguidos —emulando a la banda británica Coldplay, como algún internauta bromeó el día de la venta de entradas— lo hubiera llenado igual, como muestra que 1,6 millones de personas se inscribieron para buscar un ticket de ingreso.
En lo deportivo, y aunque se espera que Scaloni ofrezca el esquema que se proclamó vencedor en el Mundial, el seleccionador ya avisó en la víspera de que “empieza un nuevo proceso” y que “los que son campeones del mundo no corren con ventaja”.
Con el foco puesto en el ingrato pero necesario relevo generacional, el seleccionador tenderá a dar más minutos a los más jóvenes, un proceso ya iniciado en Catar, donde los Julián Álvarez o Enzo Fernández fueron figuras importantes.
La figura indiscutible, no obstante, sigue siendo el capitán, Lionel Messi. El rosarino recibirá desde las gradas del Monumental el calor de un público que lo aclamó hasta la extenuación.
Vía: Los Tiempos