La Paz, 14 de febrero.- Bastaron horas para que la exmandataria Jeanine Áñez le respondiera hoy martes al líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, quien más temprano se pronunció en las redes sociales sobre la posición de la Procuraduría General del Estado respecto a investigar a la Iglesia por su participación en 2019.
En sus redes sociales la exmandataria escribió: “La cantaleta de Evo Morales cambió de letra y música. Renunció, abandonó el cargo y llorando se fue por asilo cómplice, huyendo del fraude de elecciones de 2019, delito confirmado por OEA. Huía mientras sus parlamentarias masistas imploraban reunirse con Iglesia y oposición”.
Más temprano, Morales se manifestó lamentando “la falta de respeto, solidaridad y consideración de algunos jerarcas de la Iglesia Católica” contra el sector indígena que fue “masacrado”, durante lo que denominó, el gobierno de facto de Áñez.
El máximo dirigente del MAS acusó a la Iglesia de promover el «golpe», en 2019.
Sobre la “cantaleta” a la que se refirió la exmandataria, hoy privada de libertad, escribió: “Reclamar justicia y reparación para las víctimas del genocidio de los autores materiales e intelectuales del DS de la Muerte 4078 no es ninguna ‘cantaleta’. Ninguna institución religiosa debería ser aliada de la impunidad de crímenes de lesa humanidad”.
En la gestión de Áñez, entre 2019 y 2020, la exmandataria emitió el Decreto Supremo 4078. Este liberó de responsabilidades a funcionarios militares que se enfrentaban a sectores sociales.
Respecto a la participación de algunos miembros de la Iglesia Católica, en los hechos de 2019, estos asumieron el rol de mediadores.